¿Cómo incluir tradiciones familiares en su casamiento?
Los usos de las costumbres nupciales por tradición o superstición vienen desde hace siglos y envuelven los casamientos en auras místicas. A las tradiciones de siempre se les suman las familiares para dar un toque único e irrepetible a la boda.
Hay tradiciones clásicas como el brindis y el corte de la torta de casamiento original, otras más personales sobre el vestido de novia y otras que se refrescan como los souvenirs de casamiento. Lo cierto es que no solo se trata de las tradiciones que se siguen por costumbre o romanticismo, sino también de aquellas tradiciones familiares que los novios quieren incorporar para llevar consigo el vínculo con lo íntimo y lo cercano, como una forma de dar participación a la familia.
1. De las tradiciones
Desde hace siglos que las bodas están rodeadas de un cúmulo de tradiciones y costumbres. Algunas van cayendo en desuso pero otras se mantienen, no ya por la vieja creencia sino por la carga de romanticismo y el aura emotiva que transmiten en las celebraciones matrimoniales. En cierto modo, todos los invitados participan de estos ritos. Algunas familias, además, incorporan tradiciones familiares que se van transmitiendo de generación en generación, como el velo o las joyas.
2. Alianzas
El intercambio de alianzas viene de épocas remotas y, aunque creamos que tienden a mantenerse dentro de un mismo estilo y no varían en los matices, sucede que nos encontramos con un universo tan amplio para elegir las nuestras como el abanico de souvenirs originales para regalar. Sin embargo, algunas parejas deciden introducir una joya familiar, una alianza que cambia de manos cuando una nueva generación se casa.
3. La buena fortuna
En relación directa con los vínculos cercanos, llevar “algo viejo” simboliza la conexión con la vida familiar y la nueva etapa que comienza. Es de las tradiciones más arraigadas en el mundo y casi una superstición para las novias que buscan atraer la buena fortuna y, para ello, siguen con la tradición familiar e incorporan una reliquia familiar, como un broche, una pulsera o una tiara, una joya con un valor emotivo para las mujeres de la casa.
4. El velo
Es el accesorio romántico que enmarca los peinados semirecogidos y los de cabello suelto. Va ligado estrechamente con el vestido de novia sencillo y, como tal, se considera parte del vestuario ritual. Algunas novias se imaginan veladas por tradición y descubren el valor que irradia el complemento cuando se lo relaciona con costumbres pasadas o tradiciones heredadas y, así, pueden incorporar el uso de un velo de novia que hayan usado varias mujeres de la familia.
5. La iglesia
Entre los factores para elegir la iglesia perfecta se encuentra el valor afectivo. En cuanto a las tradiciones, puede ser que una familia sienta afecto por una iglesia porque allí se casaron generaciones pasadas y así continuaron desde siempre. Puede ser una iglesia pequeña en un entorno rural o una que ya haya sido alcanzada por los cambios urbanísticos y quede en pleno centro de la ciudad.
6. Vestido de novia
Probablemente la madre de la novia haya guardado su vestido de novia con encaje para verlo puesto un día en su propia hija y estaría muy orgullosa de regalárselo. Si la prenda se encuentra en buen estado, resguardada de la luz y la humedad, quizá sea posible restaurarlo, ajustarlo a la silueta de la novia o agregarle detalles a gusto, como piedras o abalorios, o recortar la espalda para darle un toque más contemporáneo.
Conversen sobre las tradiciones familiares y cuáles les gustaría incorporar. Probablemente no sea el vestido de novia usado, sino algunos objetos del ajuar de novia, un cinto, un broche o una chaquetilla. También hay tradiciones bien argentinas, como una torta de casamiento ¡a puro dulce de leche!
