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Casamientos

El casamiento de Cheila y Uelder, íntimo y en la nieve

Hay primeros amores que son para siempre. Este es el caso de Cheila y Uelder, una pareja de enamorados que tras años de noviazgo decidieron sellar su amor con una ceremonia en San Carlos de Bariloche. ¡Conocé su historia!

Samanta Contín Fotografía

Cheila y Uelder son una entrañable pareja de brasileros que, cumpliendo su sueño de conocer la nieve, decidieron sellar su unión en San Carlos de Bariloche con una íntima y emotiva ceremonia que en la que el intercambio de votos y alianzas se efectuó en diferentes sitios de la ciudad.

Cheila y Uelder se conocieron a los 11 años en la iglesia a la que asistían juntos y, aunque al principio a Cheila no le caía bien Uelder, enseguida se convirtieron en muy buenos amigos. Fué a los 17 años de Cheila cuando Uelder le dió su primer beso y comenzaron a salir. Tras un breve impás en sus épocas de estudiantes universitarios, los novios se dieron cuenta de que no podían vivir el uno sin el otro y que todo lo que necesitaban para ser felices era tenerse mutuamente y así surgió esta maravillosa idea de realizar una sencilla ceremonia civil con familiares y amigos en Sao Paulo, lugar en el que residen los novios para luego tomar un avión a Argentina y sellar su unión matrimonial con una íntima y emotiva ceremonia en un lugar al que siempre habían querido ir: San Carlos de Bariloche.

La fotógrafa Samanta Contín fué la encargada de inmortalizar cada detalle de este particular evento de dos a través de su lente.

Para la ocasión, la novia optó por un romántico vestido escote corazón en color blanco, con detalles de perlas y acompañado por una rebeca de piel blanca. El toque de gracia a su look nupcial lo dió un encantador bouquet de flores color salmón elaborado por Carmen Greco. Como calzado, se decidió por unos borcegos acordonados en color gris que le aportaron la comodidad y la seguridad necesaria para desplazarse por los diferentes enclaves de la ciudad, sin preocupaciones. Fernanda Cevallos Makeup fue la encargada de maquillar a la novia y el peinado estuvo a cargo del estilista Gabriel Torres, quien optó por un semi recogido con aplique lateral de delicadas perlas para completar este look nupcial de apariencia romántico y sencillo.

El novio, por su parte, vistió un sencillo y elegante traje de corte clásico de la firma Novias & Compañía en color gris oscuro, acompañado de camisa blanca, corbata en color gris perla y un boutonnière en color salmón, a juego con el ramo de la novia.

Y ya listos para la celebración, los novios leyeron sus votos en una pequeña y encantadora iglesia de la ciudad, para luego repetir la escena del intercambio de alianzas en el cerro Otto, junto al lago, por el bosque y en cada mágico rincón de esta ciudad austral. De esta forma lo cuenta Cheila: “Y ahí intercambiamos nuestras alianzas y leímos los votos que nos escribimos el uno al otro, sellando y perpetuando nuestra unión como en un cuento de hadas. Y así comenzó nuestro "felices para siempre".

Para finalizar, Cheila define a la perfección y en pocas palabras lo que para ellos significa esta unión: “Nos hemos convertido en más compañeros, seguimos siendo los mejores amigos y somos el refugio seguro uno del otro.”