Quería algo que me hiciera sentir cómoda y auténtica, algo que reflejara mi personalidad. Y así fue como se materializó.

El maquillaje fue un equilibrio perfecto entre naturalidad y audacia. Los tonos suaves resaltaron mi belleza sin ocultar quién soy realmente, mientras que el toque audaz de unos labios rojos agregó un toque de atrevimiento y confianza. Me sentí como yo misma, solo un poco más radiante y segura.

En cuanto al peinado, el estilo boho que se creó fue simplemente hermoso y relajado, justo lo que estaba buscando. Los suaves rizos y trenzas entrelazadas dieron un aire de encanto natural y desenfadado, complementando a la perfección el ambiente de mi boda. Cada onda y cada detalle del peinado capturaron la esencia de quien soy, dejándome sentirme completamente auténtica y libre.

Además, no puedo dejar de mencionar la increíble atención y simpatía de Jazmín. Desde el momento en que nos conocimos, su calidez y profesionalismo fueron evidentes, creando un ambiente relajado y acogedor que hizo que toda la experiencia fuera aún más especial. En todo momento se tomó el tiempo para entender mis gustos y preferencias, asegurándose de que cada detalle estuviera perfectamente alineado con mi visión para el día de la boda. Su amabilidad y dedicación hicieron que todo el proceso fuera fluido y agradable.

Estoy eternamente agradecida por su talento y por hacer que mi día especial fuera aún más memorable.