El casamiento de Martín y Andrea en Chacabuco, Buenos Aires
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M&A
28 Abr, 2018La crónica de nuestro casamiento
El día de mi casamiento pasé la tarde en la pelu de Valeria Alberti. Estaba en compañía de mi amiga de la infancia Salomé, que vino desde San Martín de los Andes y de mi cuñada Constanza, que viajó también desde lejos, ella vive en El Bolsón. A ambas les regalé el servicio de pelu y maquillaje en agradecimiento por su compañía en ese día tan especial, un gesto que puede servirle a otra novia para con alguien querido.
El día anterior a la celebración en el registro civil mi florista Damaris Fragale, me preparó una carterita de flores. ¡Divina! Les dejo la foto, ¡pueden copiarla! Y no se pierdan el detalle del decorado de mis uñas para esta ocasión tan especial, es de July Bussetti New Nails.
Salomé, Constanza y yo compartimos peinado y maquillaje con Valeria Alberti (pelu), Marina San Martín (maquillaje) y Damaris Fragale (flores). ¡Lo pasamos genial! Compartimos sándwich de miga, bombones y espumantes. Al final éramos un montón en la previa. Se sumaron mi suegra, mi suegro, Angelito (un amigo de la familia que nos hacía de chofer) y un par de amigas más.
Seguir leyendo »A las 21:00 horas fue la celebración en la Parroquia San Isidro Labrador y luego festejamos en el salón de la Sociedad Rural de Chacabuco, nuestra ciudad. Antes de ir al salón pasamos por la casa soñada de mi vecina María Fernanda, donde hicimos fotos preciosas en el jardín y la escalera.
Esa semana llovió todos los días, pero entre las 21 y 22 del sábado el clima se portó bien, me permitió entrar a la iglesia tranquila y lucir mi súper velo de 5 metros de largo. Todo mi outfit bride lo conseguí en Proveedora de Sueños, un lugar inolvidable y con la impecable atención de Romy, Cintia, y todo el equipo.
Pude relajarme y disfrutar cada momento. Creo que eso es porque sé delegar. En ningún momento me enloquecí queriendo manejar a la gente. Cada uno de los profesionales que contratamos sabían hacer su trabajo, así que confié en ellos y les di libertad, eso me dio libertad a mí también. Se los recomiendo a otras novias que estén preparando su boda: deleguen.
La fiesta fue hermosa, ¡bailamos hasta las ocho de la mañana! Durante el vals hicimos la ceremonia de las estrellitas. Tuvimos el show de saxo de Rafael Casellas, que con su presentación sumó muchísimo estilo. Luego un show de salsa a cargo de Daio Show y, finalmente, una prima de mi marido, Vanessa Cohr. Ella es cantante y nos regaló su show de cumbia pop, la rompió. ¡Súper divertido!
Hicimos sorteos para los casados, a quienes les regalamos unas tacitas románticas de café y chocolates. A las chicas solteras que se sacaron el ramo y el anillo les regalamos un día de spa. Al chico soltero que se sacó la botella de wiski le regalamos un set de asado, que es algo que le quedará de recuerdo.
Luego el cotillón que repartimos fue personalizado: vinchas de flores de raso blanco para ellas (encontré una chica de San Nicolás que me las preparo especialmente y me las envió) y sombreros panameños blancos para ellos y para todos anteojos de sol de marco blanco. ¡Brillaban! Martin y yo teníamos una vincha para la novia y un sombrero para el novio, ambos personalizados. Los diseñaron especialmente las chicas de “De Jauja”, se las recomiendo.
Cada invitado tenía su chapita prendedor. Algunas fueron personalizadas (familia) y las demás tenían frases súper divertidas. Les dejamos un cuadro de corazoncitos para que puedan escribirnos un mensaje que luego enmarcaré para colgar en el living de casa. Esto último nos lo preparó Renata Panunzio, quien también diseñó nuestras invitaciones.
Las chicas danzarinas pudieron bailar sin que les dolieran los pies porque les ofrecimos unas bailarinas de encaje. En cada baño del salón les dejé a los invitados un set con cositas para salir del apuro, por si tenían algún imprevisto. Detalles de una novia que se agradecen siempre, ¿no?
El souvenir fue mi sello personal: cada invitado se llevó un frasquito con hierbas de té chai, mi favorito. Los invitados amaron descargarse la app y todos subieron sus fotos al álbum de nuestra boda durante toda la noche, ¡gracias, casamientos.com!
Todo lo viví de la mano de esta página. Fueron mi gran compañía y el blog mi gran salvación, ya que lo utilizaba para hacer catarsis durante los preparativos. ¿Qué más les puedo decir? ¡quisiera vivirlo otra vez! Fue el día más feliz de mi vida.
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