El casamiento de Martín y Maru en Villa Luzuriaga, Buenos Aires

La crónica de nuestro casamiento

El día de mi casamiento lo comencé a las 6 am, empezamos desde temprano porque eran varias las cosas que todavía nos faltaban comprar para ese día. Nos habíamos quedado sin plata ya, y fue todo una locura, a las corridas porque nos faltaba uno de los sillones, etc. Pero finalmente salió todo mejor de lo que esperábamos. Nosotros organizamos la fiesta con solo 5 meses (no lo recomiendo).

Si recomiendo a cada pareja que se case hacer todo con tiempo, con anticipación y, si es posible, contratar el catering, nosotros por una cuestión económica lo hicimos todo nosotros, y eso nos complicó absolutamente todo.

Llegué una hora más tarde a la iglesia, claro, al complicarse todo me atrasé con el peinado y maquillaje. Tengo una sola foto de ese momento, no lo pude disfrutar, sinceramente, pero cuando pisé la iglesia, todo ese miedo y esos nervios pasaron ¡y pudimos disfrutar la mejor noche de nuestras vidas!

Llegamos al salón y toda la gente esperándonos. Tuvimos dos entradas, una al parque y luego al salón; distintas emociones, alegría, emoción, amor, cariño, sentimos de todo, y lo más lindo es que todos nos dijeron que la pasaron tan bien como nosotros, ¡ahí nos dimos cuenta que todo el esfuerzo valió la pena!