El casamiento de Fernando y Daiana en Villa Luzuriaga, Buenos Aires
De noche Primavera Negro 8 profesionales
F&D
22 Oct, 2021La crónica de nuestro casamiento
No puedo creer estar escribiendo esto. Finalmente, el viernes 22 de octubre en el salón San Ramón Eventos, pudimos hacer nuestra tan ansiada fiesta. Los días anteriores venía preocupada por el clima, ya que daban lluvia solo ese día y yo quería casarme en el parque hermoso que tenía el salón. Probé todos los gualichos, pero cuando llegó el día, se llovió todo. Pero, así y todo, salió increíble.
Comencé yendo al salón a las 14 horas junto con mis dos mejores amigas, nos preparamos en la suite del salón, que era divina y encima tenía una tele donde podíamos ver todas las cámaras del salón. Yo miraba fascinada cómo armaban todo e iba cayendo que el día llegó. Finalmente, a las 19:30 horas ya estaban todos los invitados esperando en uno de los salones para hacer la ceremonia, allí me esperaba Sandra de la empresa La Ceremonia, mi novio y todos los invitados.
Fue super emocionante, mi novio lloraba, yo también, todos hablaron maravillas de lo linda que fue. Hablaron unos amigos, nos dijimos unas palabras. Todo de cuento de hadas... Cuando salíamos de la ceremonia, encendieron estrellitas y fue divino. Una vez terminada la ceremonia, fue la recepción, riquísimo todo, y mientras tanto los invitados se entretenían con la fotocabina.
Seguir leyendo »A las 21 y pico entraron todos al salón y nosotros hicimos nuestra gran entrada con un vídeo. El salón estaba hermoso ambientado, elegimos colores blancos y negros y temática viajera y, de menú, asado libre con ensaladas y papas fritas. Tuvimos muchas tandas de bailes, al ser 65 personas, de las cuales 58 éramos todos entre 25 y 40 años, no paramos de bailar, nadie se quedó sentado en las 5 tandas. Una de las cuales fue con cotillón de vinchas, gorras lentes, otra luminosa y otra con stand de glitter.
Hubo video de fotos, mesa dulce, tiramos ramo que se ganaban un Baileys y los hombres un whisky, también hicimos raspaditas con premios que se ganaban un perfume y, algo muy hermoso durante la noche, fue que bailamos una canción que se llama “Can I Have This Dance”, que salió precioso.
Todos los invitados hablaron maravillas del salón, la comida, el DJ, la ceremonia, nuestro baile, pero, sobre todo, de cada detalle. Fue mágico, un fiestón, de verdad. La gente le puso muchísima onda, había muchas ganas de celebrar y todos también felices que, después de 13 años, dimos el sí.
De souvenir fue una bolsa reutilizable con un kit antiresaca y un vaso térmico, en las bolsas de los niños les puse golosinas y un librito. En la barra había revolvedores personalizados, cada uno tenía una vincha o gorra en el cotillón y así varios detalles.
Las invitaciones fueron boarding pass de avión, para firmar y dejar un mensaje eran postales, las mesas en vez de números eran ciudades y el seatting plan era como una pantalla de aeropuerto con los destinos.
Aún estoy en una nube, no caigo de que ya pasó... No caigo lo increíble que salió todo, no hay un invitado que no me haya dicho lo increíble que fue todo. Estoy demasiado feliz, muy emocionada. Por fin cumplí ni sueño, después de tanto esperar.
¡Deseo de corazón que todas puedan cumplirlo pronto y que sea como siempre soñaron o más! Tengo unos videos increíbles, ¡pero no sé cómo subirlos! Espero que les gusten algunas fotos que nos sacaron con los celulares, ¡en un mes tendré las posta!
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